Hoy cuando he ido a comprar en el supermercado he visto que tenían rabo de ternera y me ha venido a la cabeza mi niñez, cuando mi madre siempre que había en la carnicería lo solía comprar, bien para ponerlo en el cocido o bien hacerlo en salsa.
Automáticamente como por un resorte,he cogido número para la tanda y lo he comprado.
Ésta receta se la dedico a la persona que me marcó en mi vida de cocinillas "mi madre", a ella también le encantaba cocinar y de cualquier cosa nos hacía un plato exquisito.
Ahora os pongo a vuestra disposición un rabo de ternera con un sabor buenísimo y que todos los miembros de vuestra familia saborearán y no olvidaros de comprar pan porque la salsa no os dejará indiferentes.
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